lunes, 11 de mayo de 2015

Dragonaut: The Resonance


Dragonaut: The Resonance
2007-2008
25 Episodios
25 Minutos por episodio aproximadamente

Sinopsis: Es un mundo futurista, donde los viajes intergalácticos son posibles, y una parte de la humanidad vive en una colonia construída en la luna. Kamishima Jin, junto con sus padres y hermana, han tomado la decisión de hacer sus vidas en dicho lugar. El día del despegue de su nave, Jin se despide de su mejor amigo, Kazuki, recordando el día que prometieron que ambos irían al espacio. Con Jin adelantándosele un poco, Kazuki le desea un buen viaje... pero justamente ése día coincide con la llegada de los enigmáticos dragones al planeta.


Reseña:Y toca el turno de un clásico no tan popular que inició allá en el viejo 2007. Producción conjunta de Gonzo y FUNimation, este anime comenzó paralelamente con un manga del mismo nombre que... pues casi termina también con el anime, un par de semanas antes.Y como éste es uno de esos títulos que vi hace mucho tiempo, y del cual sólo tenía vagos recuerdos, tuve que darle una repasada estos días, y por eso me tardé un poco con la reseña, lo siento.


Ok, tampoco es como si lo haya visto todo otra vez, estuve viendo algunos capítulos, aunque nunca completos, para refrescar la memoria, porque sinceramente en el aspecto técnico estaba totalmente perdido. La historia, sin embargo, no me la perdí en ningún momento. Aunque tiene un buen arranque y un concepto algo original, no se deja de sentir muy aleatorio en todo momento. Es decir, el avance siempre está sujeto a pequeños eventos que deben ser resueltos inmediatamente, y que no trascienden además de que son sumamente repentinos y generalmente no están muy bien respaldados.


Tal vez esto mismo le dé cierta sensación de agilidad, que bueno, nadie se la quita, es verdad, se siente dinámico y este es un punto bueno que impide que cualquiera de sus capítulos se sienta como relleno en cualquier nivel. Sin embargo, también impacta de modo en que nunca sabes para dónde está jalando, de pronto puede saltar cualquier cosa que le dé un giro, y no mucho después puede pasar lo mismo que tuerce nuevamente la trama entera. En adición, los personajes son muy superficiales y realmente no se sienten auténticos en ningún momento.


Ni siquiera el protagonista, que tiene suficientes móviles para ser más profundo, no deja de actuar de forma que nunca es creíble, es sumamente vacío y predecible, y quizá sea peor afirmar que ya ni siquiera lo es porque cumple con cualidades estándar o predefinidas, apegándose a algún tipo de estereotipo, en cuyo caso al menos haríamos coraje por esto. No, pasa que, para no gastárselas pensando en darle vida a un personaje, se le pone una serie de características forzadas para que funcione al menos de manera llevadera. Pero no, aquí simplemente es un cascarón que habla y actúa para cumplir con las necesidades que requiere el avance de la serie, pero no más.


Por otra parte, el resto de los personajes también incumple con el objetivo básico de crear conexiones con el vidente, que uno se sienta atraído por sus situaciones. Si acaso Kazuki, quien goza de buenos móviles y contexto, pero cuyo papel se ve reducido y patéticamente retomado rumbo al final para crear dramatismo que no es justificado. Así que, en el caso grave de buenos personajes, esta cosa falla estrepitosamente.


Afortunadamente la historia, aunque muy frágil y fácilmente maleable, además de que llega el punto en que pierde la capacidad de causar algún tipo de sorpresas, no deja de ser interesante y darle soporte a los veinticinco capítulos. Sí, tiene fallos en sí misma, como que muchos argumentos sean sorprendentemente arbitrarios y sacados de ninguna parte, además de que, oh sí, se siente lo abrupto y las prisas apenas se vislumbra que debe terminar.


En cuanto a lo técnico, pues bastante bien, tuvo enfoque al menos en que lo visual no fallara como lo hicieron los personajes, muy enfocados en alguna secuencias de acción y el movimiento de los mechadragones, además de muchos vuelos apantallapendejos mientras se esquivan miles de proyectiles. En cuanto a voces también estuvo muy decente, contó con los trabajos de Ono Daisuke y la nasal Chihara Minori en los protagónicos, también oímos a Kakihara Tetsuya, Hirano Aya, Miyano Mamoru, Suwabe Junichi, y a mis dos seiyuus favoritas, Sawashiro Miyuki y a la fantastiquísima Kobayashi Yuu.


Veredicto.


Lo bueno: Un casting de seiyuus que es puro pinche amor. Historia muy dinámica y buenos efectos visuales.
Lo malo: La historia le da por cambiar de rumbo a cada rato, giros muy repentinos y poco contextuales, muy arbitraria en ocasiones y atropellada rumbo al final. Los personajes no dan de sí. Fanservice bastante estúpido.
Lo faltante: Unas clasecitas de anatomía para el diseñador de personajes, que las cinturas de sus modelos femeninos se pudieron quebrar bajo el peso de sus propias carnes.

Calificación: 7.



Dragonaut: The Resonance es un anime que, extrañamente, no se deja de disfrutar a pesar de la bola de fallos que tuvo. Quizá sea que, aunque sosa y poco creíble, la relación entre Jin y Toa haya sido el pilar que sostuvo lo demás y nos mantuviera interesados. Algunos giros son interesantes, otros cambian la perspectiva por completo. De todos modos, digo yo, sigue siendo una buena opción para mirar cuando no se tenga opción, o quieras explorar los veteranos de la década pasada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario