Fukigen na Mononokean
2016
13 episodios
24 minutos por episodio aproximadamente
Sinopsis: Caminando por su vecindario Ashiya Hanae se topa con un extraño ser al que confunde con un muñeco, por esto decide ponerlo a la vista de su dueño cuando vaya a buscarlo. Con lo que no contaba esa que tal peludito estaba muy lejos de ser un juguete, sino un youkai que se queda prendado de él y le causa fatigas y otros problemas en la escuela. Harto de su situación acudirá a pedir la ayuda del amo de la Mononokean, un chico misterioso llamado Abeno Haruitsuki. A partir de entonces Hanae descubrirá que hay youkai por todos lados, y la relación que tiene el amo de la Mononokean con ellos.
Reseña: Este anime de trece episodios, de la ya muy, muuuuuuuuy lejana temporada de verano (chale) estuvo basado en el manga homónimo de 2013, de la mangaka Wazawa Kiri, quien no destaca por otras obras, parece que éste es su primer gran hit. Dicho manga se publica de manera mensual en la Gangan Online, junto con otros pesos pesados como Barakamon, Watamote, Gekkan Shoujo Nozaki-kun, Tanaka-kun wa Itsumo Kedaruge, y un chingo más que ya no vale la pena estar mencionando. Bajo la inversión de muchas productoras (lo que se reflejó en el producto final), el trabajo de animación corrió por cargo de Pierrot Plus, una subsidiaria del famoso estudio que se ha involucrado o realizado series como Beelzebub y sus OVAs, Sabagebu!, entre otras pocas.
Fukigen na Mononokean es una de esas historias que echan mano lo más posible del folclor japonés, con una premisa gastadísima de un mundo youkai que comparte espacio con el de los humanos (quienes son ignorantes del primero), teniendo ciertos nexos, uno de los más comunes y recurrentes: el chico/chica normal que se envuelve o de pronto tiene contacto con estos seres, aunque en algunos casos ha sido de toda su vida. Y que no suene mal, es cierto que es una premisa que ya vimos muchísimas veces por todos lados, esto no es una señal de que un anime vaya a ser malo, siempre depende de cómo es manejado el resto de sus elementos para saber si va a funcionar o sólo va a ser una serie más del montón. El problema con esto es la falta de originalidad para concebir este tipo de historias, así que con ese punto negativo deberíamos esperar que el resto, en la lista de parámetros a calificar, sobresalga.
Digamos que en este caso no fue ni fu ni fa. Fukigen se queda a medio camino por muchas razones, siendo la más importante de todas el que no tuviera espacio suficiente como para que la historia tuviera un objetivo más importante y menos frívolo. Esto fue quizá porque la adaptación se sintió muy fiel a su material fuente, y no quisieron saltarse cosas o resumir otras tantas: la aceptación e interacción de Hanae con los youkai debía ser algo que no apresuraran o forzaran. Esto se agradece, y sinceramente fue lo mejor para todos, pues habría odiado que, de modo contrario, comprimieran los eventos de modo que buscaran llevar la serie hasta un hito del manga de mucha más relevancia. Aunque aclaro, no soy seguidor de éste y no puedo asegurar que así pasó, sólo son mis conjeturas.
Como fuese, el hecho innegable es que este es uno de esos casos en que la trama se estanca: las situaciones a resolver suelen ser episódicas, excepto rumbo al final, que para variar intentan inyectar tensión al crear una problemática que deberá ser resuelta con un poco más de abundancia. Y sigue sin funcionar, porque los personajes no dan de sí, tristemente. No sé cómo le hicieron teniendo todo el espacio para construir a los personajes sin tener que sacrificar la línea argumental, que repito era muy pobre y además se estancaba. Tampoco es que hayan sido terribles, cumplían con sus objetivos, pero con una nulidad en sus trasfondos que arrastraron la serie entera.
Muchos de los capítulos sirvieron para introducir lo que parece ser un grupo de personajes recurrentes que podrían cobrar importancia en eventos futuros, aunque muy teóricamente, pues dentro del anime parecía que sólo ayudó a matar el tiempo. Ninguno toma el rol determinante que se esperaría, y en la serie se quedan como en el aire, esperando a resaltar de una forma más medular. Lo mismo pasa con algunos de los argumentos utilizados, que se quedan sin explicación ni tienen el peso que cualquiera hubiera deseado. Es posible, insisto, en que sean elementos que busquen construir un universo más rico y ambicioso, y que si eres lector del manga sepas por qué, para qué y cómo de cada uno de ellos.
Mi pregunta, en tal caso, es sencilla: ¡¡¿para qué chingados la pretención de enfrascarlo todo en un anime de 13 piteros episodios?!! Si tienes algo que promete, y que necesita de tiempo para desenvolverse por completo y de verdad intrigar a la audiencia, dale más espacio, ¡¡carajo!! No termina en nada, no explica nada y ciertamente no quedan sentimientos de saber qué pasa. Al final tiene pinta de ser un anime completamente supérfluo con una que otra historia bonita que le adorne. Y no me malinterpreten, esto es malo porque se siente que la obra tiene potencial.
La animación, definitivamente, es su punto fuerte. Creo que no he visto nada tan visualmente espectacular en este año, lo cual dice mucho de Pierrot (en serio). Fuera de que los tonos y colores sean los adecuados, que los escenarios y las texturas relucieran, y que las pausas en los personajes humanos fueran muy contadas, ¡los youkai lucían simplemente geniales! Modelos CGI bellamente trabajados y pintaditos tan a detalle que era una delicia verlos caminar, moverse, interactuar con el resto de los personajes perfectamente bien incorporados. Si tiene un punto negativo ha de ser en el mundo Youkai, que se veía muy incompatible con los personajes; era como un teatro guiñol de figuras completamente planas y sin volumen, con modelos tridimencionales moviéndose en él, lo cual no pegaba para nada.
La música también resalta, aunque no es nada del otro mundo, ni tampoco memorable, tenía melodías que le venían bastante bien, para ser un anime de ritmo tan lento y de situaciones sin importancia. El opening estuvo bien a pesar de no ser de mi total agrado, y el ending es sólo un pretexto para que los seiyuus interpretaran una canción juntos, lo cual lo convierte en algo completamente bleh. Entre el talento actoral que pudimos encontrar aquí sobresalen Kaji Yuki y Maeno Tomoaki en los roles principales, haciéndolo excelentemente bien, como acostumbran. También escuchamos a Ootani Ikue, Suwabe Junichi y al señor Tachiki Fumihiko.
Veredicto.
Lo bueno: Excelentísima animación, vale la pena verse sólo por ésta. Muchas historias bonitas y conmovedoras.
Lo malo: Los personajes en general son malos: no son creíbles y tienen contextos muy débiles. No va a ningún lugar e introduce muchos argumentos y personajes que no tienen ninguna relevancia. Le hizo falta tiempo para llegar a algún punto realmente importante.
Lo bonito: ¡¡Moya moyaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!
Calificación: 7.
Fukigen na Mononokean no es mala, es una buena serie a la que parece que no le hicieron completa justicia. Supongo que, dado lo grandioso de su animación no hubo presupuesto suficiente para convertirla en una serie larga, lo cual es una completa pena. No cumplió lo que estoy seguro que cumpliría en caso de que vea una segunda temporada. Y mientras estamos a la expectativa, tenemos esta como base.