lunes, 19 de febrero de 2018

Houseki no Kuni

¡¡Amigos!! ¡Estoy de vuelta! Oigan, sé que esto es muy extraño, es decir, tanto tiempo de abandono, y creo que se merecen una explicación. No se preocupen, es en extremo breve: decidí no continuar con este blog hasta recibir cuando menos un comentario o una petición para reseña. Y, como ven, pasó mucho tiempo para que esto se llevara a cabo. Como sea, cayó una petición en el facebook de esta página, e inmediatamente me fui a ver el anime en cuestión y pues aquí estamos.



 
Houseki no Kuni
También conocida como: Land of the Lustrous; Mi Waifu es un mineral /not
2017
12 episodios
24 minutos por episodio aproximadamente

Sinopsis: Tsukijin, los misteriosos habitantes de la luna, bajan a la tierra con un solo propósito: llevarse consigo alguno de los preciados minerales que moran en una isla distante. Sin embargo, estas 28 piedras antropomorfas pondrán resistencia y defenderán su vida en su preciada academia junto a su maestro (Sensei).


Reseña: Houseki no Kuni fue un anime de 12 episodios transmitido durante el otoño del 2017, que fue precedido por una ONA de un minuto lanzada en 2013. Esta animación está basada en un manga homónimo que desde el 2012 y hasta el momento en que esta reseña se escribe, sigue activo. Dicha obra, de la mangaka Ichikawa Haruko, se publica en la revista especializada Afternoon, y parece ser el despegue de la autora, que en su haber sólo tiene un par de títulos cortos de cuatro capítulos cada uno.



Lo primero que se nota, tras los primeros segundos del episodio uno, es lo increíblemente deliciosa que va a ser toda la animación. Y sé que no suelo comenzar por lo técnico a la hora de escribir una reseña, pero en serio, gente, es lo primero que salta a la vista. Los escenarios son extensos y las formas que se mueven en ellos, desde las nubes en el cielo, el océano, la luz que se refleja en las olas, el pasto o las hojas de los árboles, todo este movimiento está siempre muy cuidadosamente detallado y le da una vida a esta serie que sinceramente no se ve muy a menudo. El cabello de las gemas es su punto más característico, pues dentro de la historia es la única parte visible de su cuerpo que no es cubierta por ropa o por un polvo especial que les hace lucir como si tuvieran piel. Este "cabello" en realidad es un efecto cgi brillante que emula, tanto en color como en textura, la gema en cuestión.




Sin embargo, esto último tiene su parte mala. Respecto a los personajes, están animados con la misma técnica, es decir, son modelos tridimensionales pintaditos de anime, con sus ojos prominentes y una línea negra que siempre les está delineando. El problema que tuve, desde el principio y hasta el final de la serie, es que su "cabello" luce tan brillante y cuidado (con formas que iban desde lo sencillo hasta lo extremadamente elaborado), que contrasta de manera muy negativa con las texturas de la ropa o la piel, que eran básicamente inexistentes, sólo era color ahí con un poco de sombra muy estandarizada. Es decir, el atractivo de los personajes es el cabello, el resto simplemente no pega de manera congruente con las pestañas y el cabello que tienen. Cada una de ellas se refiere a sí misma con "boku", que es la forma del yo más típico para decir de un hombre (aunque en las mujeres es más como algo que se ve como de poca educación), además de que se pueden referir a otras con "hermano menor" o "hermano mayor", así que digamos que aunque parezcan mujeres en realidad su género es neutro. Porque pues tampoco tienen boobs.





Seguimos con lo técnico, porque uff, tiene minutos que terminé esta serie y sigo impactado con lo que acabo de ver. Todo lo que rodea a las chicas, escenarios y elementos no vivos que se mueven en éste, tiene un nivel de detalle soberbio, piedras, paredes o incluso papel. Las partes de acción realmente brillan por la manera en que la cámara se desplaza vertiginosamente, o incluso rota alrededor de los personajes sin que estos se deformen o parezca poco creíble, o los momentos variados en que los cuerpos se quebraban como cristal. Llegan a haber texturas de humo o pelo que realmente hacen lucir esta serie como pocas. Si acaso, en el apartado de las quejas (y para poder zanjar todo este asunto) diría que las contrapartes, los Tsukijin, también palidecían en contraste de lo que les rodeaba, sus pieles y ropas carecían de detalle que los hiciera mezclarse con su entorno de una manera adecuada.




No puedo decir que el diseño de los personajes sea de mi completo agrado. Mientras hubo algunos peinados muy elaborados y vistosos, en general cada uno de ellos tenía el mismo cuerpo y la misma vestimenta, eran como muñecas de cuerpo idéntico a la que sólo se les cambiaba la cabeza. Hubo una que otra más distinguida en cuanto a ropa, pero sólo era porque tenía una bata encima o algo así. Digo, sé que es mucho pedir con todo el detalle que la serie tuvo, pero realmente tuve que rascarle para encontrarle algo malo. El diseño de los Tukijin es impresionante, aunque muchos de ellos (las pijas) también tenían el defecto de ser idénticos, había unos pocos mucho más elaborados y grandes. Es un espectáculo ver un grupo muy numeroso moverse al mismo tiempo.
 
Ahora, digamos que lo que respecta a la historia, pues las cosas no son del todo brillantes. Una de las primeras trabas que me encontré fue que el primer par de capítulos es un tanto pesado. La serie no es en absoluto amigable con el espectador, de pronto eres introducido a este universo donde los personajes, que de por sí son muchos desde el principio, comienzan a hablar y a interactuar entre ellos sin ningún tipo de precedente que lo haga más digerible. No estoy en contra de que al televidente se le trate como un ser inteligente que es capaz de ir deduciendo de qué va la historia, sin que lo tengan que estar llevando de la mano explicándole cada detalle detenidamente. El problema aquí es que, para llegar a entender más o menos la situación, hace falta eso, dos capítulos, y es el tipo de obras que tienen tantos elementos, que es mejor un inicio un poco más relajado.


Para ser sincero, no sé qué pasó entre el segundo y tercer episodio. Los personajes fueron ganando encanto y a pesar de que ninguno, además de la protagonista, tuvo tiempo suficiente como para crear más empatía, la interacción entre ellas se hizo muy ligera y amena, al punto en que era simplemente interesante y divertido mirarlas enfrentando diversas situaciones, y ni el hecho de que personajes nuevos iban apareciendo muy constantemente pudo mermar este lado positivo de la serie. Hubo entre ellos algunos un poco estereotípicos, sí, pero su actuar no estaba completamente recargado en éste, y a TODOS se les podía ver reaccionar lógicamente según la situación, y esto lo agradezco mucho. (¡¡Me recontra caga ver personajes serios que siempre están serios, así estén matando a alguien en sus narizotas!!).


Peeeero, llegamos a otro problema. Sí, los personajes eran divertidos y poco a poco se ganan tu corazón. Pero la historia, como tal, creo que se siente muy blanda. Sus puntos fuertes son que jamás se sintió un bajón en el ritmo, las cosas avanzaban muy aceptablemente y, además del primer par de capítulos, no sentí que hubiera alguno especialmente aburrido o tedioso. Tampoco es que se sintiera que fuera inconexa, porque cada uno de los eventos que pasaba era detonado por el que le precedía, y al final sientes que es una serie que está bien ligada y de la cual no puedes saltarte un capítulo porque luego te confundirías. Sin embargo, nunca dejé de sentir que la historia era demasiado aleatoria y en general no estuvo claro nunca a dónde quería ir o cuál era su objetivo. Los personajes, como comunidad, carecían de un móvil más convincente, y sólo estaban ahí y peleaban básicamente por que sí, casi casi por instinto. Todos los puntos en que la serie giraba en una dirección nueva son muy arbitrarios, lo mismo que pasa con muchos de los argumentos que son implementados más tarde (tengo ejemplos, pero creo que listarlos sería un poco spoilear ciertas cosas).



Otro de los puntos negativos son "los villanos". Y lo pongo entrecomillado porque nunca quedó claro. Es decir, no es spoiler, no teman (ya saben que aquí nunca los leerían), me refiero a que estos chicos malos también carecían de un móvil que explicara por qué esa obsesión por robarse los minerales (quizá en el manga se explique, pero entiéndase que mientras se salga de la comprensión de la animación, tal punto vale técnicamente pito), y cada una de sus acciones, en vez de obedecer las ambiciones obvias de un villano más elaborado, parecían sólo seguir los movimientos básicos e instintivos de cualquier depredador. Sus apariciones, más que el enriquecer la historia, generalmente tenían el objetivo de mantener el ritmo o para darle su momento de brillantez a cierto personaje.





Además, su fuerza variaba dependiendo de si al autor le convenía fueran una amenaza o mero entretenimiento. No entendí nunca por qué de pronto llegaban débiles como carne al matadero en vez de que desde el principio fueran muy fuertes y amenazantes. Es decir, jamás se explica o se da a entender que hay un orden lógico en sus apariciones. Bien, se menciona algo en algún momento, pero la verdad es que a mí me dejó muy insatisfecho.




Entre el talento actoral que pudimos escuchar resaltan Kugimiya Rie (<3), Kayano Ai y Kurosawa Tomoyo en el protagónico. Y también un poquititititito de la increíble Romi Paku. Y pues ya, porque prácticamente todas fueron seiyuus mujeres y ya saben que para mí no hay diversidad de voces, muy pocas resaltan realmente. ¡Ah! Y el señor Nakata Jouji, que... pues la verdad no me encanta, pero es digno de mención por ser el único ochinchin entre tanto omanko.



Veredicto.

Lo bueno: Una animación que te pinches cagas. La serie vale la pena sólo para ver lo chulo que se ve todo. Es muy entretenida, los personajes son muy cuchis y no se siente que la calidad baje en ningún momento.
Lo malo: A pesar de todo, la animación tiene sus meh, que resaltan muy para mal entre tanto win. En realidad los primeros capítulos son muy pesados y tarda un poco en terminar de convencer. La historia es muy arbitraria, no hay un objetivo claro, los villanos son de risa y en general se siente que le faltó mucho espacio para llegar a algún punto importante que explicara cosas que no se entendieron.
¿A quién chingados le importa?: Las pinches fórmulas inbetween.

Calificación: 7.



Creo que a Houseki no Kuni le faltó algo porque no terminó de sorprenderme más allá de lo bien hecha que estuvo. Tiene los personajes, tiene el contexto, quizá cuando se sepa por qué los villanos las desean tanto hasta sean convincentes. Pero le falta ALGO. No es una serie mala en absoltuo, la recomiendo porque me entretuvo mucho y, uff, esas secuencias de acción valen tu tiempo. Pero no dejo de sentir que tiene lastres que no permieten que brille como podría. ¿Entendieron? Brille. Ah, soy un pinche comediante.