Sakamichi no Apollon

Sakamichi no Apollon

También conocida como: Kids on the Slolpe

2012

12 Episodios

22 minutos por episodio aproximadamente

Sinopsis: Nishimi Kaoru es un muchacho de carácter retraído e introvertido gracias a que por su situación familiar ha tenido que mudarse una y otra vez, por lo que no tiene la habilidad de hacer amigos, su único hobbie es la música clásica, al grado de saber tocar el piano. Kaoru se muda a Kyushu, a casa de su horrible tía y prima, para continuar estudiando la preparatoria. Sin embargo, la vida en su nuevo hogar no pinta tan mal cuando conoce a Ritsuko y Sentarou, un par de amigos de la infancia que viven muy apegados al jazz. Kaoru descubre una nueva pasión en este género, mientras aprende un poco de relaciones humanas.

Reseña: Sakamichi no Apollon es un anime que llegó a mí gracias a una recomendación. Basado en un manga con el mismo nombre, esta historia se ambienta a mediados de la década de los sesenta, para incrementar la importancia del jazz en el contexto general, pues de otro modo quizá hubiera sido poco realista. Así, de entrada, al ser una serie del tipo musical, trata de involucrarnos un poco más en el género, aunque no de maneras tan estándares, sino simplemente haciendo que la música fluya orgásmicamente cada episodio.

Lejos de explicaciones técnicas o sobredesarrollo de la práctica, Kaoru se incorpora al mundo del jazz escuchando simplemente a grandes exponentes, y luego, naturalmente, aprende de su estilo y es capaz de adherirse al grupo de forma increíble, apasionándose rápidamente con ello. Aunque la música es estupenda y en sí es el contexto en el que se apoya toda la trama, no es el punto principal de la historia, sino el motor que le da vida.

Tratándose de un josei, de los buenos, Sakamichi no Apollon detalla con más énfasis todo tipo de relaciones que se van desencadenando entre los personajes, los amores y desamores, los malosentendidos, y, por supuesto, la amistad. Es cierto que, como señalan en algunas reseñas, la trama principal podría parecer algo vacía y genérica, hasta predecible, pero no creo que esto deba ser inherentemente malo. Como indico en la primer entrada de Aclaraciones, el que el cliché sea bueno o malo siempre depende en la manera que sea usado. Sakamichi no Apollon, definitivamente, es del tipo que sabe inyectar espíritu y drama a sus personajes y su desenvolvimiento en pantalla.

Sí, los personajes son otro gran atractivo de la serie, y esto es gracias a su alto grado de humanidad, no son moldes prefabricados ni aburridos (tal vez Sentarou no salga tan bien librado acá), y tampoco son tan complejos y súper dramáticos, sino que se apegan más a un modelo más sencillo que es mucho más fácil de digerir. El móvil que cada uno tiene es suficientemente simple y convincente, y vale mucho más la interacción entre ellos que el enfocado desarrollo individual de cada uno.

Aunque en personajes secundarios el casting sea increíble (Sakurai Takahiro!!, Okamoto Nobuhiko y Suzumura Kenichi), siguen siendo secundarios y sus personajes no tienen mucho tiempo en pantalla. Afortunadamente el rol principal es llevado por Kimura Ryouhei (si te gustó en Gin no Saji, ¡acá también te encantará!), además de que también tiene a Hosoya Yoshimasa (de quien no soy fan, pero bueno, es medianamente popular) y Suwabe Junichi (ídem, no soy fan xD).

Pues, qué les digo, Sakamichi no Apollon tiene un desarrollo encantador y sólo por la música ya valdría la pena, pero para nuestra buena suerte, también goza de una buena historia detrás.

Veredicto.

Lo bueno: Erótico soundtrack, aunque no te guste el jazz, buenas voces involucradas, buena historia.
Lo malo: Aunque la historia es buena, puede resultar predecible o muy plana, dependiendo de tus gustos.
¡A leer el manga! Si te gustó Sakamichi no Apollon, tengo entendido que es de esos casos cuyo final tuvo que inventarse para darle fin al anime, así que si quieres más, corre a comprarlo, y si no está disponible en tu país, pues ya sabes, hay scanlations por doquier. Sí, ya está terminado.

Calificación: 9.


Culpable, la animación fue suficientemente fluida y brillante, los personajes de mi total agrado y cada capítulo era una gran experiencia. Un anime que por sí solo habría ganado un ocho fácilmente, sube gracias a la música usada en éste, completamente magistral.