No.6

No.6

2011

11 Episodios

23 Minutos por episodio

Sinopsis: En un mundo futurista y de la postguerra se ha formado una sociedad perfecta, una utopía, donde los seres humanos viven al margen de las reglas y de la jerarquización según sus habilidades e inteligencia. Shion es un joven niño con estándares altísimos que tiene un futuro brillante preparado, hasta que una noche conoce a un vagabundo de más o menos su edad que está huyendo y al que decide ayudar dándole posada por una noche. Unos años después Shion aprenderá que tal mundo no es tan perfecto como creía, y que ese incidente con Nezumi va a desencadenar desastrosos eventos en su vida.

Reseña: Vamos a empezar con una observación muy curiosa, y es que MAL simplemente se pasó por las bolas el Shounen Ai y sólo lo etiquetó como Sci-Fi y Action. Probablemente la novela ligera (que también contó con una adaptación en manga) de la que se basó tenga mucho más contenido de este tipo, pero sólo para dejarles claro: sí, aunque muy poco, la etiqueta estaría justificada. Mientras sean peras o manzanas, yo lo dejaré así.

Ahora, la historia se centra en la vida y desventuras de un pequeño prodigio que ve su vida irse a la mierda gracias a la intervención de un vaguito de quien se enamora, ¿suena lógico? No, porque obviamente no lo es, pero bueno, aquí valió más el hecho de aprender la justa verdad y amar sólo por ello, aunque dentro de la historia trate de explicarse la retribución no podría ser más contradictorio. Otro punto a resaltar es la repetitividad de los cuentos que relatan la perfección tan superficial que conlleva vivir en una sociedad utópica, desde el clásico de Huxley, "Un Mundo Feliz".

No se preocupes, no les hablaré de literatura, no deben ir a leer nada porque estaré igual o mucho peor que ustedes. Pero la idea es esa: una sociedad falsa que se construye con el sufrimiento de otros o la sangre derramada de muchas generaciones. Si bien hay un giro donde salen un poco de ese contexto, el fantasma queda ahí y se vuelve el conductor principal de la trama, que se vuelve más evidente conforme nos acerquemos al final. De todos modos éste no lo salva a centrarse en sólo sus dos protagonistas y dejar muchos personajes de fuera, cuando el tipo de historia que se plantea pudo explotar mucho más otros personajes y subtramas.

Puede parecer un tanto repetitivo, pero la historia pronto cambia de aires y se centra más en la asimilación de Shion por el modus vivendi de los excluídos y por el pasado oscuro de Nezumi. Se agradece mucho que no haya ningún corte en la secuencia de los capítulos y ninguno se sintiera como relleno. Por el contrario, la trama no se retorció demasiado y cada argumento fue fácilmente digerible, y el final no fue tan malo como esperaba, aunque sí... deja muchas cosas sin concluir.

Lo que respecta a la animación y música, diremos que ambas fueron muy precisas. Mientras las escenas de acción estuvieron bastante fluidas y el entorno siempre tuvo detalle y profundidad, la música amenizaba perfectamente cada escena sin fallo alguno. Entre las voces que pudimos escuchar estuvieron el siempre adorable Yuki-tan, Miki Shinichiro y al odioso de Shirakawa Daisuke.

Veredicto.

Lo bueno: Continuidad entre sus episodios y final decente.
Lo malo: La trama parece perder el hilo pasados los primeros capítulos, se enfoca muy marcadamente en dos personajes únicamente, y en sí se siente que pudo dar mucho más de sí pero se fue por el camino soft.
Mano arriba: Si cada vez que lees No.6 imaginas la voz del countdown de Animal Planet al extremo, "¡Númeroooooo seis!".

Calificación: 7.


A pesar de que por sí solo es un anime que está muy bien logrado en muchos niveles, la tensión se ve cortada rápidamente y se convierte en un "under" slice of life que obliga al protagonista a adaptarse a un entorno mucho más precario del que acostumbraba. Afortunadamente se encamina nuevamente por el rumbo original, pero es al final y lo de enmedio, aunque no fue malo, se siente contextualmente contradictorio. Y sí, que te enamores del pendejo que te echa a perder la vida es ridículo... oh, wait, creo que eso pasa todos los días.

En fin...