martes, 14 de julio de 2015

Samurai Flamenco

Samurai Flamenco
También conocida como: Samumenco
2013-2014
22 Episodios
23 Minutos por episodio aproximadamente

Sinopsis: Hazama Masayoshi es un atractivo modelo que está totalmente fascinado, desde su infancia, por los programas de televisión tipo super sentai (por sus orígenes, así como Power Rangers entre muchos otros). Durante su vida entrenó y se propuso a sí mismo convertirse en uno de esos héroes a los que tanto admiraba. Pero el mundo real (¿eh? Digamos, figurativamente) es mucho más exigente que el de ficción, y puede ser que la sociedad realmente no quiera un héroe... aunque lo necesite.


Reseña: Samurai Flamenco es un anime original de estudios Aniplex y Dentsu que abarcó dos temporadas entre 2013 y 2014. Como es común con muchas de estas animaciones originales (es decir, que no se basan en otra cosa previa ya sea un manga o novela ligera), arrancó casi paralelamente con un manga del mismo nombre al que subtitularon como "Another Days", que apenas duró un par de meses más en publicación y que desconozco totalmente qué tan alejado esté de su contraparte animada. Como sea... ese manga luce realmente horrible técnicamente, así que lo arrojaremos al inodoro de Satanás (nuestro señor) y no volveremos a hablar más de él.


Como sea, Samurai Flamenco es un anime con una temática fresca y atrevida. El meollo principal del asunto, es decir, el hilo conductor de la serie, o bien, trama, es bastante sólida, llamativa y fabulosamente manejada. Ésta nos lleva por una serie de eventos que llevan a Masayoshi, o su alterego, Samurai Flamenco, a casi imponerse como héroe ante un público que en un principio lo toma como un loco.


La idea es simplemente fantástica. La evolución de los personajes, sobre todo del protagonista, es paralela a los hechos, y se da naturalmente, sin ser forzada de ninguna manera. Se sigue una línea que, digamos, es incluso creíble. Un fenómeno que se acrecenta gracias a las redes sociales y que comienza a causar boom por todos lados, con algunas salpicadas de los clichés clásicos del género de superhéroes, como el ocultar identidades.


Otra cosa que le mete muchísimo encanto a esta serie es la idea de un héroe que es justo en extremo, cumpliendo las normas al pie de la letra, y peleando con artículos muy ingeniosos que técnicamente no son armas... porque las armas están prohibidas. Cosas pequeñas hacen de Samurai Flamenco un héroe totalmente creíble, tirar la basura correctamente, no tomar lo que es ajeno, no armar trifulcas, vivir al pie de lo aceptable. Es decir, hechos tan supérfluos que pasan a diario y que deben ser corregidos, y una figura que busca que éstos, así como las problemáticas más grandes, deban ser resueltas dentro del marco de la justicia.


¿Y qué? Bueno... Pues esta serie es una mierda. Si hay algo que de verdad me haga encabronar más que ver una serie que es mala de cojones, pero desde el principio, es ver que algo tan bien planeado y bien encaminado se vaya a la reverenda casa de la chingada de un momento a otro. Imagínate que estás leyendo los libros de Harry Potter y por el cuarto hay un giro argumental que dice que todo ha sido plan de los extraterrestres. Algo así que inconcordante y estúpido pasa con Samurai Flamenco.


Además de esto, la secuencia también se va al demonio. Si bien al principio parecía una historia más homogénea cuyos capítulos se interrelacionaban de forma eventual, los hechos que suceden esto, luego de los gloriosos capítulos de arranque, plantean subtramas absurdas, estúpidas, arbitrarias y risibles que serán resueltas en dos o tres capítulos. La ligadura entre "sagas" es muy delgada y el encanto del todo se ve sumergida ante la marejada de porquería que nos cae encima.


Dentro de lo técnico también tiene sus fallas. Es verdad que los escenarios son como de lujo, con muchísimos detalles y buenas tramas por doquier. El problema con la animación recae directamente con los personajes, que suelen distorsionarse de tanto en tanto (sobre todo Gotou, ¿qué onda con eso?) cual hentai de... pues presupuesto muy alto. Musicalmente, pues bastante decente, sobre todo el primer opening interpretado por SPYAIR, allá en los bellos momentos en que la serie parecía ser buena.


¿Seiyuus? El malditamente genial Sugita Tomokazu, KENN, Ishida Akira (¡¡Akira janai, Katsura da!!), y a la verga todo lo demás. Blergh.

Veredicto.


Lo bueno: Arranque espectacular, mágico, increíble, bello y lleno de sentimiento bonito. Muy creíble y bastante original.
Lo malo: TODO SE HACE CAGADA. La lógica dentro de la serie se traiciona a sí misma. Se pierde la continuidad, se vuelve estúpida y arbitraria, además de predecible (sí, acéptenlo).
Advertencia: Sacrificaré un gatito por cada persona que vea esta blasfemia. No quieren eso, ¿verdad?

Calificación: 4.



Sí, va a haber mucha gente que me odie, y sólo le pongo cuatro por el comienzo tan genial que tuvo. Ódienme sin miedo. No creo que haya algo peor que un giro así de brusco que traicione totalmente el contexto que se había planteado desde el principio. Es como si en Naruto de pronto salieran magos. No estoy en contra de estos giros tan idiotas, siempre que haya bases que se vayan planteando desde UN PINCHE PRINCIPIO. Este tipo de patada en las bolas no la hace ni Shyamalan, por favor.

jueves, 9 de julio de 2015

Mawaru Penguindrum

Mawaru Penguindrum
2011
24 Episodios
24 Minutos por episodio aproximadamente

Sinopsis: Para Takakura Shouma no existe la palabra destino, pues su significado conlleva cosas muy crueles. La vida de los tres hermanos Takakura está envuelta en tragedias y momentos difíciles, sin embargo han permanecido juntos gracias a los lazos fuertes que los unen desde pequeños. Es así hasta que la salud de su hermana menor, Himari, que venía padeciendo desde hace mucho tiempo, alcanza un punto crítico que la pone al borde de la muerte... Aquí es donde interviene un ente extraño que se apodera de su cuerpo através de un gorro de pingüino, y alerta a los dos hermanos mayores que para mantener a su hermana viva deben descubrir (y proteger) el misterio que hay detrás del llamado Penguindrum.


Reseña: Mawaru Penguindrum, anime de finales del 2011, fue una animación de estudios Brains Base en colaboración con Sentai Filmworks (y otros por ahí). Se basó en la novela ligera homónima del grupo compuesto por Hoshino Lily en el arte (creadora de Otome Youkai Zakuro), Ikuhara Kunihiko (creador de Shoujo Kakumei Utena y colaborador en el anime de Bishoujo Senshi Sailor Moon) y Takashi Kei, estos últimos a cargo de la historia. De dicha novela también se desprendió, desde el 2013, un manga que actualmente sigue publicándose, con ilustraciones de Shibata Isuzu.


Como era de esperarse, se planeó el anime con material "suficiente" como para abarcar una buena parte de su material fuente, pero en algún punto torciendo su historia para alcanzar un final alternativo. El problema, como sabemos, no es éste precisamente, pues hay ejemplos de cosas que se separan de su concepción original y terminan realmente bien. Aquí el detalle negativo está en que, como es de esperarse, el final es malo, y encima dejan muchísimos puntos totalmente sin explicaciones y sin que hayan tenido ningún peso en el desenlace.


Comenzaremos en que, la historia no está mal encaminada y jamás pierde su objetivo, parece que arranca con un buen melodrama de romances y tormento... aunque la trama sí parece avanzar de formas o muy forzadas o muy arbitrarias. Los argumentos que, "por definición", están conectados, lo están "porque sí", sin profundizar en las causas pero sí poniendo muy de manifiesto todas sus consecuencias. Esto hace que por muchas partes la estructura de la historia se sienta débil, y que al avanzar nos podamos encontrar con más de estas situaciones.


Sin embargo, hay algunos puntos fuertes que nos mantienen ahí, capítulo tras capítulo. La interacción de los personajes, no se puede negar, es fantástica. Hay algunos que rozan algunos clichés, pero funcionan perfectamente en sus puestos y hacen que las cosas sigan. Además, gracias al original, es de ese tipo de series que avanzan al mismo tiempo que, en pequeñas dosis, varias cosas van siendo explicadas con flashbacks, lo que si bien no fortifica la médula del todo, sí le da algo de sentido. Insisto, muchas de las cosas que van ligadas entre sí es de manera muy poco explicativa.


El argumento del sombrero, pues le da cierto encanto y todo, pero se queda en el viento de una manera tan volátil que se esfuma como si nada. Lo mismo pasa con varios hechos que parecen ser clave que acontecen sobre todo durante los primeros capítulos. Muchas definiciones propias que irradiaban importancia durante la serie se quedaron fuera de la jugada al carecer completamente de explicaciones que llenaran los huecos, dejándonos con puros sinsentidos que, al menos al principio o a la mitad, parecían tener qué ver, pero que simplemente son dejados a un lado. ¿Qué ocurre con esto? Que hasta parece que dichos capítulos son relleno, aunque no lo parezcan, pues tales planteamientos no llegarán a nada absolutamente. ¿El final? Increíblemente absurdo, arbitrario, precipitado y estúpido, que insisto, termina porque sí y deja muchas cosas en el aire.


La animación está muy bien detallada y tiene efectos muy interesantes, y ni qué se diga del diseño de personajes, todos ellos tienen características bien definidas y son fácilmente identificables. Mi problema con la animación estuvo en la ausencia total de modelos para los personajes de fondo. Lo que se hizo fue poner muñequitos idénticos que iban y venían. Esto no le da un toque característico, lo hace verse mal, que lo hicieron con flojera y que todo el esfuerzo fue invertido en otras cosas.


El casting de seiyuus estuvo conformado por Kimura Ryouhei, Horie Yui, Ishida Akira, Paku Romi y Koyazu Take-voz sensual-hito. Una mención especial a Arakawa Miho, quien tiene una voz encabronadamente dulce de la que es muy difícil no enamorarse. Hurra por ella, que le den más trabajo.


Veredicto.


Lo bueno: Buena interacción entre personajes, historia muy bien encaminada. Gran actuación de voces. ¡¡Los pingüinos!!
Lo malo: La animación con sus espacios de weba. La arbitrariedad y poca solidez en la trama. El pinche final rompegüevos. Y Kanba. Y la manzana.
¿Será cliffhanger?: Que para saber qué pedo con todo lo que no explicaron debamos leer la novela liger... Pues no, gracias.

Calificación: 6.



Hubo mucho encabronamiento de mi parte cuando terminé de ver esta serie. Se siente como si al acabar hubieras perdido el tiempo con muchas cosas que simplemente se pasaron por el arco del triunfo y no se molestaron en darle una explicadita rápida. Y el final por sí mismo es tan ridículo que le pone en toda la madre a lo demás que estuvo bien. Normalmente sería una serie a la que le hubiera puesto un ocho, pero las carencias ahora pesaron más que lo que realmente brilló. Se disfruta y eso, pero si eres igual de mamón que yo... pues te sentirás profundamente traicionad@ cuando la termines. Advertidos todos.


¿Ya estamos de vuelta o qué?

lunes, 6 de julio de 2015

Más de un mes sin Kwondherland...

Y bueno, una más de estas tristes entradas.

Así es, por motivos varios, entremezclados con mi propia postergación, pasó más de un mes sin que viéramos una sola reseña. Me disculpo infinitamente por esto, y sólo puedo decir (en vez de prometer), que ya estamos de vuelta y recargados.

Sé que ya terminó la temporada de primavera, pero tengo ahí pendientes unas cuantas reseñas más que simplemente no podemos dejar pasar. Así que, lo siento, verano, vas a tener que esperar una o dos semanas mientras tratamos de ponernos al corriente.

Y no les escribiría esto si no tuviera algo ya preparado, así que, de vuelta y listos para reanimar esto.




Eso sí, no me puedo ir sin antes agradecer a todos los que sin falta se dan una vuelta diariamente para ver si hay algo por acá. Me sorprendió que, a pesar del horrible abandono que le di al blog desde junio pasado, el contador de visitas simplemente no se detenía.

¡¡Gracias!!