Fate/Stay Night

Fate/Stay Night

2006

24 Episodios

24 Minutos por episodio

Sinopsis: Emiya Shirou es un muchacho aparentemente normal. Rescatado de un catastrófico evento que le arrebató la vida a sus padres, fue criado por su salvador, un hombre llamado Emiya Kiritsugu, de quien no solo hereda el apellido, sino de quien aprende un poco de artes mágicas, hasta convertirse en un chico preparatoriano. Sin embargo, cuando se ve envuelto en una batalla entre dos magos más experimentados, invoca a una guerrare llamada Saber, hecho que le vale la entrada a un battle royale entre más magos y sus invocaciones, cuyo premio final es el Santo Grial.

Reseña: Retrocedemos en el tiempo hasta encontrarnos con la primera entrega de la serie Fate, lanzada en el ya lejano año 2006. Basado en el manga del mismo nombre, Fate/Stay Night es el tipo de anime de acción donde varios rivales deben enfrentarse entre sí hasta que sólo uno quede en pie, en una encarnizada batalla de romance, lágrimas, sufrimiento y mucho, mucho aburrimiento.

Lo más evidente en este título es la falta total de chispa en todos sus personajes, no existe ningún tipo de desarrollo y ni el contexto previo con el que se introduce al protagonista es suficiente para hacerlo algo atractivo o simpático, por el contrario, es más como el tipo de moldes que sólo sigue ciertos lineamientos y sigue varios diálogos, sin expedir sensación alguna de profundidad o motivación.

Mientras que Shirou es un fallo espectacular como protagonista, tanto rivales como aliados sufren del mismo mal, todos son una serie de personajes estereotipados, sin gracia, y son manejados de una forma muy estándar en el shounen donde las escenas parecen estar preparadas con el simple objetivo de lucir cools o muy sombríos (lo cual falla de todos modos), pero decepcionando igualmente cuando tienen más tiempo en pantalla.

Si bien la idea principal puede parecer interesante, ni el modo tan pesado en que es llevada, ni los personajes, ni siquiera las batallas, le brindaron la chispa que necesitaba. Cuando llega el momento del enfrentamiento con el enemigo en turno hay cierto enfoque en su pasado y en un desarrollo espontáneo e inecesario, además de sobredramatizado, delegando la lucha en un segundo plano y rematándola con alguna especie de power-up, dejándonos con una sensación de vacío absoluto.

Tan cierto es que pudieron trabajar en la profunidad de las peleas, como lo es que se pudo hacer algo con los personajes tan vacíos o con los rivales tan triviales e intrascendentes. Se agradece mucho el hecho de querer conectar todos los puntos claves esparcidos cuidadosamente através de los 24 episodios con un final que pintaba para bien, pero no deja ninguna satisfacción el terminar un anime tan estirado, con un romance tan plano, pretencioso, simple y casi inexistente.

Aunque los efectos en la animación, el diseño de los personajes e incluso la música se mantengan al nivel, hubo algo detrás que nunca funcionó. Entre los seiyuus destacables que intentaron darle vida a unos personajes sin esperanzas estuvieron Sugiyama Noriaki, Miki Shinichiro, Suwabe Junichi y Kamiya Hiroshi.

Veredicto.

Lo bueno: Buen casting de seiyuus (hasta eso), buena animación y grandes efectos de batallas, además de ambientarse con música muy decente. Un intento de final revelador.

Lo malo: Personajes horribles, narración pesada y aburrida, muy difícil de ver y un intento de final revelador que se quedó en eso... un intento.

Sin ganas: De seguir viendo lo que salió después de esta saga. Aunque tengo entendido que las temporadas Zero son grandes aciertos (o al menos lo que me han dicho), no me han quedado ni tantitas ganas de darles una oportunidad.

Calificación: 4.

Un gran intento que terminó siendo un fiasco enorme. Ódienme, fans, pero Stay Night no puede ser más que la aburrida primer serie que dio paso a una exitosa saga. Con personajes carentes de personalidades, una historia un tanto plana y sin giros notables, rematada por un final excepcionalmente decepcionante, no merece la fama que ha ganado.